El pasado 23 de febrero se llevo a cabo la presentación del primer libro de cuentos de mi carnal Juan Bandini Mendoza tecladista de Undercover. El evento fue en la nueva sede del Dada X ubicado en avenida Cuauhtemoc, cerca del Alicia en la colonia Roma Norte.
No había tenido el chance de ir y bueno, me gustaron las nuevas instalaciones y distribución del Dada. Por fin se le iba a hacer a Undercover tocar después de mucho tiempo de espera en este lugar. Literatura y Rock se dieron cita esa noche en donde tuvimos el honor de alternar con la banda hermana Varsovia 54 con quienes ya habíamos tenido el gusto de compartir escenario en la fiesta de aniversario del Foro de Rock 101.
La presentación del libro estuvo a cargo de Liz González, Rogelio Flores y Carlos Martinez, quienes junto con Juan se encargaron de poner a andar esa noche al Zombie que por fin había despertado. Muchas caras conocidas, amigos en común, tanto del Foro Rockcientoúnico, como músicos y gente que se va conociendo al andar en este camino.
Nosotros llegamos con dos horas de anticipación para llevar a cabo la prueba de audio. Ninguna de las dos bandas estaba completa, por parte de Undercover solo habíamos llegado Marvin (guitarra), Juanito y yo. Del lado de Varsovia solo se encontraba Hugo (bateria) y con los que estaban comenzamos a hacer las respectivas pruebas. En esas andabamos cuando Bandini saco un pequeño whisky para quienes habíamos llegado puntuales.
El ya nos había informado que iba a llevar una botella de whisky para cada banda como obsequio por parte del zombie, pero menciono que debíamos ser muy cuidadosos y degustarlo bajo el agua ya que obviamente no esta permitido ingresar bebidas alcohólicas en el lugar. Yo tan buey olvide esa premisa y me costo una buena reprimenda por parte de uno de los cuates de seguridad quien advirtió que si me veía con la botella de nuevo me sacaría del lugar.
Así que el whisky prometido tuvo que ser guardado para nuestro siguiente ensayo (2 días después). Poco a poco fueron llegando los demás integrantes de ambas bandas y Undercover fue el encargado de hacer la prueba con un par de rolas. Cada tocada es una oportunidad para aprender algo y esta no fue la excepción. Undercover confiando en el PA (Poder de Amplificación) del lugar, que es el mismo que tenían cuando el Dada estaba en el centro, no llevamos amplificador ni para el teclado ni el bajo. Optamos por conectarnos en línea y pagamos un precio alto por ello.
No sabíamos si por estar conectados tantos en línea habíamos saturado el equipo o si la falta de pericia del ingeniero (que ya no era el mismo de cuando estaban en el centro) habían sido la causa para que allí enfrente no nos escucháramos bien. Los monitores no estaban cumpliendo su función como debían y nos confiamos por los comentarios de quienes estaban afuera de que todo sonaba bien.
Varsovia comenzo y rifaron como siempre. Aunque fue un set corto se disfruto de principio a fin y es que los Varsovios tienen oficio en esto de tocar. El Gish me pidió prestado el bajo a lo cual accedí y ya al final me dijo que arriba no se escuchaba nada. Efectivamente así era pero en la parte de enfrente se escuchaba muy bien. Llego el turno de Undercover y bueno, siendo honestos fue de altas y bajas. Nos divertimos eso sí, pero hay detalles que aún deben pulirse.
La enseñanza aquí fue que, a pesar de que en un lugar te puedan proporcionar el PA, lo recomendable es que uno cargue siempre con su equipo. Esto para que por lo menos en la parte del escenario todos nos escuchemos y no haya problemas de ese tipo. El ingeniero podrá controlar el volumen de la voz, los coros y la bateria si esta microfoneada, pero para todo lo demás nosotros tenemos el control.
Pero bueno, el objetivo principal se cumplió que fue hacer de esta noche, la noche de Bandini -valga la redundancia-. El no me dejará mentir y se la paso muy a gusto, firmando su libro, tocando y brindando con todos sus amigos que se dieron cita para ser testigos del andar del zombie.
Esta fue la primera pero Mari (esposa de Juanito y representante) ya advirtió que no será la única en que el Zombie salga a dar el rol y con el, todos los Undercovers.
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No había tenido el chance de ir y bueno, me gustaron las nuevas instalaciones y distribución del Dada. Por fin se le iba a hacer a Undercover tocar después de mucho tiempo de espera en este lugar. Literatura y Rock se dieron cita esa noche en donde tuvimos el honor de alternar con la banda hermana Varsovia 54 con quienes ya habíamos tenido el gusto de compartir escenario en la fiesta de aniversario del Foro de Rock 101.
La presentación del libro estuvo a cargo de Liz González, Rogelio Flores y Carlos Martinez, quienes junto con Juan se encargaron de poner a andar esa noche al Zombie que por fin había despertado. Muchas caras conocidas, amigos en común, tanto del Foro Rockcientoúnico, como músicos y gente que se va conociendo al andar en este camino.
Nosotros llegamos con dos horas de anticipación para llevar a cabo la prueba de audio. Ninguna de las dos bandas estaba completa, por parte de Undercover solo habíamos llegado Marvin (guitarra), Juanito y yo. Del lado de Varsovia solo se encontraba Hugo (bateria) y con los que estaban comenzamos a hacer las respectivas pruebas. En esas andabamos cuando Bandini saco un pequeño whisky para quienes habíamos llegado puntuales.
El ya nos había informado que iba a llevar una botella de whisky para cada banda como obsequio por parte del zombie, pero menciono que debíamos ser muy cuidadosos y degustarlo bajo el agua ya que obviamente no esta permitido ingresar bebidas alcohólicas en el lugar. Yo tan buey olvide esa premisa y me costo una buena reprimenda por parte de uno de los cuates de seguridad quien advirtió que si me veía con la botella de nuevo me sacaría del lugar.
Así que el whisky prometido tuvo que ser guardado para nuestro siguiente ensayo (2 días después). Poco a poco fueron llegando los demás integrantes de ambas bandas y Undercover fue el encargado de hacer la prueba con un par de rolas. Cada tocada es una oportunidad para aprender algo y esta no fue la excepción. Undercover confiando en el PA (Poder de Amplificación) del lugar, que es el mismo que tenían cuando el Dada estaba en el centro, no llevamos amplificador ni para el teclado ni el bajo. Optamos por conectarnos en línea y pagamos un precio alto por ello.
No sabíamos si por estar conectados tantos en línea habíamos saturado el equipo o si la falta de pericia del ingeniero (que ya no era el mismo de cuando estaban en el centro) habían sido la causa para que allí enfrente no nos escucháramos bien. Los monitores no estaban cumpliendo su función como debían y nos confiamos por los comentarios de quienes estaban afuera de que todo sonaba bien.
Varsovia comenzo y rifaron como siempre. Aunque fue un set corto se disfruto de principio a fin y es que los Varsovios tienen oficio en esto de tocar. El Gish me pidió prestado el bajo a lo cual accedí y ya al final me dijo que arriba no se escuchaba nada. Efectivamente así era pero en la parte de enfrente se escuchaba muy bien. Llego el turno de Undercover y bueno, siendo honestos fue de altas y bajas. Nos divertimos eso sí, pero hay detalles que aún deben pulirse.
La enseñanza aquí fue que, a pesar de que en un lugar te puedan proporcionar el PA, lo recomendable es que uno cargue siempre con su equipo. Esto para que por lo menos en la parte del escenario todos nos escuchemos y no haya problemas de ese tipo. El ingeniero podrá controlar el volumen de la voz, los coros y la bateria si esta microfoneada, pero para todo lo demás nosotros tenemos el control.
Pero bueno, el objetivo principal se cumplió que fue hacer de esta noche, la noche de Bandini -valga la redundancia-. El no me dejará mentir y se la paso muy a gusto, firmando su libro, tocando y brindando con todos sus amigos que se dieron cita para ser testigos del andar del zombie.
Esta fue la primera pero Mari (esposa de Juanito y representante) ya advirtió que no será la única en que el Zombie salga a dar el rol y con el, todos los Undercovers.
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